
Educación Primaria
Esta etapa es privada y está en proceso de ampliación. Actualmente acoge los 5 primeros cursos de Educación Primaria. Cada año se integra un curso nuevo, hasta llegar a sexto.
Nuestra educación se basa en una visión de la persona que complementa la propuesta del currículum. Tenemos un ideario fundamentado en los valores cristianos del evangelio, buscando una educación humanista, integral e innovadora, realista y abierta a lo sobrenatural. Esto se desarrolla a través de propuestas activas como:
- • Aprendizaje cooperativo.
- • Trabajo por proyectos.
- • Educación emocional.
- • Formación Espiritual.
- • Participación activa y solidaria.
-
Nuestro deseo es educar a la persona de manera global, atendiendo a su vez a la diversidad de nuestro alumnado. Entendemos el conocimiento y uso de las leguas como "puentes" que nos ayudan a comunicarnos con otras personas y llegar a conocer y apreciar otras culturas.
Las salidas y excursiones que se proponen, nos ayudan a generar momentos de convivencia entre el alumnado y profesorado en entornos diferentes, a la vez que se fomentan aprendizajes vivenciales, que impliquen la participación de todos y promuevan actitudes de respeto hacia las personas y el entorno.
¡Buenos días!
Los "Buenos días" comenzaron siendo "Buenas noches" y tienen su origen en 1841. Don Bosco creó estos pequeños momentos de oración con el objetivo de hacer reflexionar a los jóvenes sobre algún tema concreto que pudieran aplicar en su día a día.
"Cada noche, después de las oraciones habituales y antes de que los alumnos marchen a descansar, el Director o alguien por él, dirija algunas palabras afectuosas en público, dando algún aviso o consejo respecto a cosas que se deben hacer o evitar e ingénieselas para sacar las lecciones de hechos sucedidos durante el día en el instituto o fuera, pero su platiquita no pase nunca de los dos o tres minutos. Ésta es la llave de la moralidad, de la buena marcha y del éxito de la educación". Reglamento del Oratorio de D. B.
En nuestro centro, cada mañana dedicamos unos minutos a la reflexión y la oración. Empezamos el día poniéndonos de cara al Señor y a la Virgen para que nos ayuden en el nuevo día que comienza.
